Pastoral de la Misericordia

Estos años hemos vivido tiempos difíciles. La pandemia del Covid-19 nos cambió la vida a todos, y, en especial, a nuestros hermanos mayores.

Nuestros abuelitos, que antes de la crisis sanitaria aún salían a hacer sus compras, al supermercado, a jugar cartas con sus amigos o a misa los domingos, de un día para otro se vieron forzados a encerrarse y, en algunos casos, incluso dejaron de ser visitados por sus hijos y nietos para evitar contagios. Se fueron quedando solos.

Otros hermanos, por motivos de salud se ven imposibilitados de participar en la vida comunitaria de la parroquia.

Nuestra Iglesia desde el principio fue misionera, así, en la primera comunidad cristiana, cuando los apóstoles se vieron muy demandados de tareas, escogieron a siete diáconos para que se preocuparan de las viudas y otras tareas de misericordia. (Hch 6, 1-6).

Es pensando en ellos que nuestra parroquia está organizando una nueva pastoral, para ir a su encuentro.

Sin sermones ni catequesis, la idea es acompañarnos, reírnos, escuchar, compartir la alegría de sabernos amados por Dios, ser una Iglesia que acompaña en silencio, sin esperar nada a cambio. Una iglesia que va hacia sus hermanos.

Por ello, estamos invitando a los hermanos que sientan este llamado a salir como “acompañante” a unirse a esta pastoral.

También, animamos a todos aquellos que quieran recibir a su iglesia en sus casas a inscribirse.

Nuestra tarea es ser vínculo entre unos y otros, todos hermanos.

¡Anímate! Y si sabes de alguien que lo necesite, cuéntanos.