“El Santo Bautismo es el fundamento de toda la vida cristiana, el pórtico de la vida en el espíritu y la puerta que abre el acceso a los otros sacramentos”.
Por el Bautismo somos liberados del pecado y regenerados como hijos de Dios, somos incorporados a la Iglesia y hechos partícipes de su misión, es el nuevo nacimiento por el agua y la palabra” (Catecismo de la Iglesia Católica, CIC 1213).
Los padres cristianos deben reconocer que esta práctica corresponde también a su misión de alimentar la vida que Dios les ha confiado” (CIC 1250-1251).
“Id, pues, y haced discípulos a todas las gentes bautizándolas en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo, y enseñándoles a guardar todo lo que yo os he mandado. Y he aquí que yo estoy con vosotros todos los días hasta el fin del mundo” (Mt 28, 19-20).
Las catequesis tienen como finalidad esencial iluminar el cristianismo en la vida de los padres y padrinos e invitarlos a vivirlo seriamente para poder traspasar la fe a sus hijos y ahijados y ayudarlos a desarrollar el sacramento que piden para ellos. Esta es la misión más importante de los padres, traspasar la fe a sus hijos.
“Las catequesis se hacen, fundamentalmente, en la perspectiva de ir transmitiendo las experiencias vividas por los catequistas, en relación con los acontecimientos diarios con el Señor. No es, de ninguna manera, transmitir conocimientos. Es ver “cómo a través de los acontecimientos de tu vida, puedes transmitir a otros, tu experiencia con la FE de Jesucristo, recibida en la Iglesia”.
Las catequesis (4) se efectúan, generalmente, los días lunes y viernes, a las 20:00 horas, durante dos semanas.
Los Bautizos se realizan los días sábado, según calendario, a las 11:00 o 12:00 horas, dependiendo del número de bautizados (opcionalmente a las 16:00 horas) o según las disposiciones del Párroco.
Más informaciones en la secretaría.